- Organizar la información de tus inventarios
Como podrás imaginar, tener un inventario organizado es el primer y más fundamental paso para tener una visión real de tus inventarios y poder optimizarlos. Para ello, es muy importante contar con un catálogo actualizado y depurado de tus productos.
- Diseña tu propia política de inventarios
En segundo lugar, debes tener una política bien definida. En ella se debe de establecer los tipos de productos que necesitas tener en almacén, la clasificación, su rotación y las fechas en las cuales es indispensable realizar auditorías y revisiones periódicas.
- Clasifica tus productos
La forma más práctica de tener todo el inventario organizado es clasificarlo en por lo menos 3 categorías principales: productos de alta rotación, de temporalidad y especiales. En esta clasificación, deberás poner foco a los productos de alta rotación, en los que puedes predecir muy bien el nivel de ventas y su comportamiento en el inventario.
- Monitorea todo el tiempo
Una vez que tienes bien pensado el panorama sobre cómo quieres armar tu inventario y controlarlo, será indispensable que monitorees los niveles de existencias. Esto también se logra manteniendo una comunicación firme con tus proveedores para que ambos puedan estar preparados ante cualquier eventualidad.
- Invierte en tecnología para la gestión de tu inventario
La tecnología no puede quedar fuera de este tema, pues una suite de herramientas en línea te ayudará en la organización y gestión de tus inventarios; además de apoyarte en procesos de contabilidad, facturación, puntos de venta, gastos y proveedores.
Recuerda que la importancia en el control de inventarios reside en el objetivo primordial de obtener utilidades en tu empresa, ya que sin inventarios no hay ventas. Con una gestión adecuada, evitarás mermas y desperdicios que puedan causar un efecto negativo sobre tus utilidades.
