Sin importar la etapa de desarrollo en que esté tu negocio, hacer que tu personal trabaje verdaderamente en equipo le dará el impulso definitivo que requiere para crecer.
Cuando las personas realizan sus funciones en un ambiente de colaboración se sienten más satisfechas y comprometidas con los resultados. De este modo, tanto los clientes como sus empleadores obtienen mayores beneficios.
Sin embargo, lograr el ambiente de colaboración empresarial propicio es un gran reto.
Tu meta será cambiar paradigmas para dar prioridad al éxito del equipo sobre los logros individuales, y el primer paso es preparar a cada integrante para una participación más intensa.
Te compartimos seis acciones que te ayudarán a desarrollar un entorno de colaboración:
1. Comunica las expectativas de la empresa
Deja claro que la colaboración será el estándar mínimo. Define roles y responsabilidades dentro del equipo.Cada miembro de tu equipo debe entender su posición y lo que requieres de él.
En un entorno de colaboración, cada integrante asume su responsabilidad en la obtención de buenos resultados y en la satisfacción del cliente.
2. Fija las metas del equipo
Asegúrate de tener objetivos medibles cada trimestre. Si logras que el equipo se centre en objetivos, sus miembros mantendrán los esfuerzos individuales alineados para alcanzar los resultados deseados.
Publica el resultado de cada objetivo trimestral. Esto mantendrá centrados a todos.
3. Propicia el ambiente creativo
Admite siempre las preguntas y fomenta la lluvia de ideas en un entorno que no emita juicios.
Guía al equipo para que vea los obstáculos como estorbos que puede quitar, cultivando una actitud de «puedo hacerlo».
Pregunta «por qué» o «por qué no» de manera habitual y capacita a tu gente para el liderazgo, esto desarrolla el carácter.
Contrata empleados que aspiren a ser y producir lo mejor de sí mismos.
4. Forja la cohesión del equipo
Incluye a cada miembro en tantas decisiones importantes como sea posible.
Mediante la colaboración en línea, crea una forma de mantener actualizada la comunicación sobre flujos de trabajo, para evitar la duplicación de esfuerzos.
Inicia el hábito de realizar reuniones diarias donde cada uno comparta lo que va a lograr ese día. Esto mantiene a los miembros del equipo en la misma jugada.
5. Promueve que todos se conozcan
En todos los equipos hay diferentes personalidades, habilidades y experiencias. Es útil discutir abiertamente los distintos gustos y enfoques personales con respecto a la comunicación y las tareas.
6. Aprovecha las fortalezas individuales
Impulsa el éxito de cada integrante asignándole tareas que desarrollen sus puntos fuertes. Premia con regularidad los logros, tanto individuales como de equipo.
Recuerda que establecer una política de colaboración empresarial es solo el principio.
De ahora en adelante, mantener las condiciones adecuadas tendrá que ser un trabajo constante y con propósito. Pero verás que el esfuerzo vale la pena.
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